domingo, 21 de octubre de 2007

Maradona, con la celeste y blanca en la piel

La historia de Diego Armando Maradona en la Selección argentina está plagada de matices, de buenas y malas experiencias, de idas y venidas; pero sobretodo de momentos históricos y alegrías enormes que quedarán eternamente en el recuerdo de los hinchas.

Si hay algo que caracterizó en esta etapa al más grande futbolista de todos los tiempos, fueron el amor y el sacrificio que siempre demostró por la albiceleste. No sólo se ponía el equipo a hombro con total naturalidad (por supuesto que teniendo fundamentos técnicos indiscutibles), sino que siempre quería jugar pese a no estar en condiciones físicas óptimas. Ahí también es cuando se ve a los distintos, a los que dan un poquito más, a los líderes que dejan todo por la camiseta.

Ya en sus comienzos en la selección, se avecinaba lo que pronto vendría. Un crack había nacido y era nuestro, argentino. Con 16 años debutó en la mayor el 27 de febrero de 1977 en un encuentro amistoso contra Hungría, en el estadio de Boca Juniors, lugar donde nadie suponía en ese entonces que sería su segunda casa en pocos años. Entró por Leopoldo Jacinto Luque en un encuentro que terminó con victoria nacional por 5 a 2.

En una decisión eternamente cuestionada, el en ese entonces entrenador del seleccionado, César Luis Menotti, no lo convocó para jugar el Mundial de Argentina 1978. Pese a ya haber disputado varios encuentros y a formar parte de los 24 jugadores concentrados, Maradona se quedó con las ganas.

Su paso por los juveniles también fue inolvidable. Debutó un 3 de abril de 1977, sin obtener grandes resultados en el Sudamericano Juvenil de Venezuela. Lo mejor vendría dos años después en el Mundial Juvenil de Japón. Luego de jugar varios amistosos preparatorios para el mismo, “Pelusa” conformaría al que muchos dicen fue uno de los equipos que mejor jugó al fútbol en la historia de este deporte.

Allí integraría el plantel junto a grandes jugadores que se divertían en la cancha y entendían a la perfección. Ramón Díaz, Calderón, Escudero, Rossi, Simón y Barbas son sólo algunos de los nombres que se consagrarían campeones junto al astro luego de superar a la Unión Soviética por 3 a 1 en la final en Tokio. Fue una verdadera muestra de fútbol y Maradona fue elegido el mejor jugador del torneo.

Llegaba su primer mundial con la selección mayor. Fue en España en 1982 y Argentina no colmó las expectativas que generaba la copa ganada recientemente en su país. No pudo acceder a semifinales luego de perder con Brasil por 3 a 1.

Pero en la Copa del Mundo de Méjico 1986 Maradona tendría su revancha. Y lo que pasó fue único. Ya con Carlos Salvador Bilardo como técnico, en la zona de grupos Argentina le ganó a Corea del Sur por 3 a1 y a Bulgaria por 2 a 0, y empató con Italia 1 a 1 (con un tanto del Diego). En octavos la víctima fue Uruguay que cayó por 1 a 0; y en cuartos le tocó el turno a Inglaterra en el partido más recordado en la historia del “Diez”. La victoria fue por 2 a 1 con dos recordados tantos de Maradona, el de la famosa “mano de Dios” y el seguramente más lindo gol de todos los tiempos, en el que el argentino arrancó en mitad de cancha y desparramó rivales hasta anotar.

Con otros dos goles suyos fue inminente el triunfo ante Bélgica por 2 a 0 depositando al plantel en la final. La misma sería muy disputada ante Alemania Federal, pero finalmente Argentina levantaría la copa por segunda vez en su historia tras ganar por 3 a 2.

En el mundial de Italia 1990 Argentina saldría subcampeón tras perder por 1 a 0 con el mismo rival de la anterior final. En Estados Unidos 1994 fue su última Copa del Mundo, en la cual lo sacaron del torneo por el recordado doping positivo. Luego el equipo quedaría golpeado para finalmente caer ante Rumania en Octavos de final.

La historia ya estaba escrita. Su saldo final fue de 34 goles en 91 partidos con la selección. La gente siempre estará agradecida por todas las alegrías que este genio del fútbol le dio. Sin dudas, pocos hicieron tanto por una camiseta como lo hizo el gran Diego Armando Maradona.

1 comentario:

juan pablo dijo...

Gracias por dejar la vida por la selección Diego!